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ALGO DE AGRO-ECOLOGÍA
Luis C. Rodriguez, M.V.Z.

 
La producción agropecuaria colombiana es uno de los factores determinantes cuando se habla de economía nacional, vemos como cada día se hace más imprescindible que se apliquen nuevas políticas de producción y se generen nuevas técnicas más acordes con el cuidado del planeta. 

A partir de la revolución verde se generó el auge de los pesticidas y herbicidas que en un principio causaron un gran impacto positivo pues generaron altas ganancias al aumentar la producción de los cultivos, sin ver, claro, que los costos de producción aumentaron de igual forma. A medida que pasaron los años se volvió mas frecuente el uso de agroquímicos, sumado a esto el mal uso por parte de los campesinos genero resistencia de las plagas, erosión del suelo, acidificación de las aguas; en general una disminución significativa de las propiedades de la tierra cultivable.

Los monocultivos han sido además otro gran problema que se suma a la crisis ambiental, pues a largo plazo deterioran la calidad de los suelos erosionándolos y volviéndolos cada vez menos productivos, pues la falta de elementos que nutran el suelo como malezas y/o leguminosas y la falta de plantas que profundicen sus raíces hace que cada vez se necesiten mas abonos sintéticos para mantener la producción.

Para esta suma de problemas se hace necesario implementar técnicas y políticas que generen un verdadero cambio y que vayan de la mano con la economía del campesinado, teniendo en cuenta que en Colombia casi un 70% de la producción rural esta en manos de campesinos que tienen tierras pequeñas y trabajan en grupos familiares, los cuales siguiendo lo aprendido durante los últimos cuarenta años, bombardean la tierra con agroquímicos de forma indiscriminada en algunas ocasiones, sin conocer realmente el daño que están generando y el peligro que representa para ellos la utilización de estos productos tóxicos. 

No obstante existen grupos de campesinos que son consientes del grave daño generado a los ecosistemas y han empezado de nuevo a cultivar de forma tradicional, alimentado los suelos con abonos orgánicos los cuales pueden ser producidos dentro de su misma finca y nutriendo el suelo con leguminosas que profundicen sus raíces y eviten la erosión.

Para ir al tanto de la situación los laboratorios y casas productoras de agroquímicos se empeñan en dar una solución para este problema ambiental; la utilización de productos biológicos no contaminantes, los cuales ofrecen un principio activo basado en "enemigos naturales" de las plagas, pero a costos tan elevados que hace que el campesino muy poco se interese en comprarlo, de esta manera para la economía del campesino (y con mucha razón teniendo en cuenta la calidad del vida del los campesinos de nuestro país) es mas barato comprar un producto extremadamente toxico barato que un producto biológico no dañino de alto costo.

La idea de desarrollo sostenible nace a raíz de todas las complicaciones que se presentaron por el manejo inadecuado de la tierra (agroquímicos, monocultivos, siembras de cultivos ilícitos con la posterior fumigación, contaminación de las aguas) en el auge de la revolución verde, inmerso   en este desarrollo sostenible encontramos la agroecología, esta encierra dentro de su concepto todos los aspectos relacionados no solamente con el medio ambiente (contaminación, aridez del suelo, calentamiento global) sino, con el ámbito sociocultural y económico del campesinado (situaciones de pobreza, desplazamiento forzoso, conflicto armado, sobrepoblación urbana, marginación).  

Uno de los principios básicos de la agroecología es renovar los sistemas de producción reimplementando las técnicas tradicionales, haciendo rotación de cultivos, reciclando material vegetal para realizar retroalimentación del suelo con el material de "desecho", utilizando y aplicando el conocimiento tradicional de las personas del campo en cuanto a plantas y animales, y sobre todo eliminando paulatinamente los agroquímicos derivados de la revolución verde. Generando de esta forma una agricultura limpia, sostenible y acorde con las necesidades económicas de los campesinos.

Es de entender que años de uso de pesticidas y plaguicidas hacen que volver a los cultivos tradicionales sea casi una utopía, pues la resistencia de las plagas, la erosión y "desnutrición" de los suelos, hace que evitar el uso de agroquímicos sea una tarea laboriosa y de bastante tiempo, sin olvidar que la producción y los rendimientos por muy limpios que sean tenderán a bajar.

Pero para que se logren los objetivos de la agroecología es necesario que se adopten políticas de cambio, que estén completamente comprometidos con el medio ambiente y con la situación de las personas afectadas, es necesario que estas política estén encaminadas realmente a la sostenibilidad del agro, generando conciencia y alternativas de producción mas limpias evitando la contaminación de las aguas y el daño en general del medio ambiente.

De todo esto podemos concluir que es de vital importancia entender que si las técnicas de cultivo continúan como han sido durante los últimos cuarenta años, dentro de muy poco ni las mejores tierras serán aptas para cultivos, centenares de ríos estarán aun mas contaminados y se pondrá en verdadero riesgo la salud y la seguridad alimentaria.